Los campeones de la Copa América

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La Copa América tiene lugar en Estados Unidos por segunda vez en toda su historia. La primera ocasión que el país norteamericano albergó el torneo de selecciones más antiguo del mundo fue en 2016 con el Centenario. Fundada en 1916, esta será la 48ª vez que se celebre. A lo largo de los 107 años de historia, solo han conseguido hacerse con el título ocho de las diez selecciones de la Conmebol, la confederación organizadora, y nunca en la historia lo ha conseguido un combinado nacional no sudamericano.

Quienes lideran el palmarés absoluto es el dueto formado por Uruguay y Argentina con 15 títulos y participantes desde el inicio del campeonato. De hecho, los albicelestes son los actuales defensores del título, después de la recién consecución en 2021. Brasil ocupa un tercer lugar, con nueve copas y todavía lejos de los dos primeros. Ya con dos, encontramos a países como Perú, Paraguay y Chile; y, con uno, Colombia en solitario, que venció en 2001.

Una de las particularidades de esta competencia es que desde 1993 suele invitar a selecciones de la Concacaf, la confederación del norte y centro de América. En 2024 participarán seis de ellas y una de estas será México. Si bien es cierto que la Tricolor no figura entre los campeones Copa América, es toda una histórica, habiendo participado en diez ocasiones y habiendo obtenido tres medallas de bronces y dos subcampeonatos. Estos últimos, en 1993 y 2001.

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Los inicios del torneo sudamericano

Lo que hoy entendemos como un campeonato con muchos participantes, en los inicios no fue exactamente así. De hecho, no llevaba el mismo nombre que el actual. Se conocía como Campeonato Sudamericano de Selecciones y el país impulsor fue Argentina en 1916 para celebrar el centenario de su independencia. Los primeros integrantes fueron, aparte de los anfitriones, Brasil y Uruguay y la victoria fue para estos últimos.

Esta celebración fue el preludio de la formación de la Conmebol, la confederación de selecciones de fútbol de Sudamérica, y sirvió como fase de clasificación olímpica para la disciplina del deporte rey. A su vez, se disputaba de forma anual, pues hasta 1927 tuvieron lugar once ediciones y el dominador absoluto fue Uruguay, campeón olímpico, con 6 campeonatos. Lo siguieron Argentina, con 3; y Brasil, con 2.

A partir de la década de los 30, ya no tenía como premio el boleto a los Juegos Olímpicos y empezaron a incorporar otros países, que consiguieron romper la hegemonía de los tres. La Copa América historial incorporaba en 1939 un nuevo e inesperado campeón, el Perú de leyendas como Teaodro Fernández y Jorge Alcalde, y empezaron a participar conjuntos como el bolivariano, el colombiano y ecuatoriano.

De este periodo, que duró más de tres décadas, destaca la falta de organización, pues el número de equipos era cambiante y no había un intervalo claro entre campeonatos. Todo se regularizó en 1975, cuando se quiso hacer un lavado de cara al torneo, cambiándolo de nombre y reajustando el formato.

En las 29 ediciones celebradas hasta la fecha, Argentina (actualmente líder del grupo A) lideraba la tabla clasificatoria, con 12 trofeos, superando en uno a su rival histórico, Uruguay. Brasil tenía tres copas, pues aún no había explotado futbolísticamente la nación, y cerraba el palmarés Bolivia, Paraguay y Perú. Las tres, que no sumaban excesivas participaciones, habían logrado una vez cada una de ellas consagrarse como campeonas.

1975, el nacimiento de la Copa América

El torneo sudamericano vivió ocho años de parón y volvió en 1975 con una nueva cara, adquiriendo el nombre de Copa América. Aprovechó la ocasión para cambiar el formato: ya no se disputaba todos contra todos como antaño, pues al tener más equipos se apostó por una fase de grupos y unas eliminatorias para decidir el nuevo campeón. También se decantaron por no tener una sede física y los encuentros de eliminación disputarlos a ida y vuelta. Y, no menos importante, por primera vez, acudieron los diez equipos de la Conmebol al completo.

Este formato solamente duró tres ediciones: 1975, 1979 y 1983. Durante estas, se confirmó el idilio de Uruguay Copa América, consiguiendo la duodécima. A su vez, sirvió para ampliar las vitrinas peruanas y paraguayas, que ya sumaban dos campeonatos y se acercaban a la canarinha.

Nueva renovación y momento de esplendor

El momento de auge del torno fue a partir de 1986, cuando los organizadores decidieron restablecer las sedes físicas y fijar un periodo dos años entre celebraciones, rotando por los diferentes países de Sudamérica. Con el fin de reducir los tiempos y agilizar la competencia, no habría choques de ida y vuelta y las igualadas se resolverían con un tiempo extra o penaltis. Este cambio generó gran expectación en Europa y Norteamérica, donde se empezaba a seguir de forma activa.

En 1993, con Ecuador como país anfitrión, fue la primera vez que se invitaba a dos combinados nacionales externos y el honor fue para Estados Unidos y México. A partir de entonces, sería una tónica habitual para la organización, pues además de despertar el interés fuera de las fronteras, ayudaría a una mejor organización tanto de los grupos como de las rondas eliminatorias posteriores.

De ese periodo cabe destacar la relación Brasil Copa América, pues la canarinha consiguió entre 1997 y 2007 cuatro de los cinco títulos continentales firmando un hito histórico. En ese equipo confluían dos generaciones de enorme talento con jugadores de la talla de Romário, Ronaldo, Cafú, Robinho, Ronaldinho o Dani Alves. En dos finales vencieron a los argentinos, agrandando una rivalidad ya imborrable; y en otra, a uruguayos.

El único equipo que durante ese tiempo fue capaz de arrebatarle el trofeo fue Colombia, que en 2001 ejerció de anfitriona, y se coronó por primera vez como campeona del torneo sudamericano. Dirigido por Francisco Maturana, destacaban nombres de la talla de Iván Ramiro Córdoba, Mario Yépes o Victor Aristizábal.

La transformación de los tiempos modernos

En 2010, la Conmebol volvió a hacer cambios sustanciales. Uno de ellos es que las ediciones tendrían lugar cada cuatro años para no coincidir con eventos deportivos de gran magnitud. La primera vez en que esto se aplicó fue en 2011, en Argentina, momento en el que Uruguay conseguiría su decimoquinta copa con un equipo que brillaba por su talento ofensivo con nombres como el de Luis Suárez o Diego Forlán. Desde entonces, los charrúas no se han vuelto a subir a lo más alto del podio.

En las dos siguientes celebraciones sucedería algo histórico, pues un equipo que nunca había conseguido el título lo conseguiría por dos veces consecutivas y en solo dos años. Chile calcó en 2015 y 2016 una actuación de ensueño. Con una generación dorada liderada por talentos como Alexis Sánchez, Arturo Vidal o Eduardo Vargas consiguió hacer sufrir a las más grandes para llevarse la copa. En ambas ocasiones llevó a Argentina a la tanda de penaltis en la final, para allí hacerse grande y conseguir un doblete que está escrito en las páginas doradas del torneo.

A todo esto, cabe hacer especial mención a la edición de 2016 por diferentes motivos. Se conoce como el Centenario, pues se conmemoraba el siglo de vida del campeonato y fue la que más participantes tuvo por aquel entonces con un total de 16 con invitadas de la Concacaf. Por si fuera poco, el país anfitrión no era sudamericano, sino que se daba plena confianza a Estados Unidos, siendo el primer organizador externo a la Conmebol desde su fundación.

Tres años después, el torneo volvió a Sudamérica y Brasil fue organizador y campeón, consiguiendo el noveno y último campeonato en su palmarés. Pese a que el equipo de Tite contaba con bajas sustanciales como la de Neymar Junior, la canarinha lideró con mano de hierro todo el torneo con jugadores brillando en la élite: Thiago Silva, Philippe Coutinho o Everton. En las semifinales vencieron al conjunto albiceleste en lo que se consideraba una final anticipada y en el partido decisivo hicieron lo propio con Perú. En la última edición, celebrada también en territorio brasileño, Argentina Copa América volvieron a unirse después de casi tres décadas sin hacerlo. Desde 1993 que no salían vencedores de este campeonato, pese haber llegado a cuatro finales, y se agruparon todos en torno a la figura de Leo Messi, el gran capitán, para conseguirlo. El 10, mejor jugador del torneo, pudo resarcirse en el legendario Maracaná, ganando a su principal rival, los brasileños, con un solitario gol de Ángel Di María.

Copa América 2024, todo por decidir

En la Copa América de este año, que se puede seguir y vivir a través de Betsson, son muchos los puntos de atracción a destacar. Para empezar, todos los focos de atención están puestos en el combinado argentino, que puede desempatar con Uruguay (que hace parte del grupo C) al frente de la tabla. Conseguir el trofeo sería algo realmente histórico, pues nunca antes un combinado nacional había encadenado dos sudamericanos con un Mundial de por medio. Sería una demostración más de la hegemonía del conjunto dirigido por Lionel Scaloni en estos últimos años.

Otro foco está puesto en Brasil, que hace parte del grupo D. Gran decepción en la última edición tras caer en el Maracaná. Por si fuera poco, en la Copa del Mundo de Qatar 2022 también dejó bastante que desear cayendo en cuartos de final. Ahora tienen un nuevo seleccionador, Dorival Júnior, así como nuevas figuras en las que centrar su juego. Neymar Junior no viajará y se erige como gran líder en el terreno de juego Vinícius Júnior, uno de los más destacados de la temporada en el viejo continente.

Por último, también despierta mucho interés el rol que podrá tener México en su undécima participación en la Copa América en el grupo B. Pese a no ser su torneo original, ha conseguido grandes resultados a lo largo de la historia y no sería nada descartable que lo repitiera en territorio norteamericano. Al combinado nacional mexicano le acompañarán otras cinco selecciones más procedentes de la Concacaf como son Estados Unidos, Canadá, Jamaica, Costa Rica y Panamá.

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